La venganza es un plato que se sirve mejor frío, o eso debió pensar el protagonista de esta noticia. El dueño de una tienda de recambios pagó la última nómina de un ex empleado con 91.000 monedas cubiertas por lo que parece ser aceite de motor. No contento con ello, el jefe decidió que era una buena idea arrojar la enorme cantidad de monedas sobre la entrada a la vivienda del empleado.
https://periodismodelmotor.com/dueno-tienda-recambios-paga-ultima-nomina-ex-empleado-91-000-monedas-cubiertas-aceite-motor/327272/
UN SALUDO