Legio I Augusta La Legio I Augusta (Primera legión «de Augusto») fue una legión romana, que posteriormente llevaría el sobrenombre de Germanica. Fue creada en el año 48 a. C. por Julio César para luchar en la guerra civil que mantenía con Pompeyo. Después de la rebelión de los batavos (70 ddC) los hombres supervivientes fueron incorporados a la séptima legión de Galba, configurando la Legio VII Gemina. Su emblema fue probablemente el toro, como el resto de la legiones del César (a excepción de la V Alaudae).
La Legio I participó en la batalla de Farsalia en el 48 a. C. Tras el asesinato de Julio César fue leal a Augusto.
Entre los años 30 y 16 a. C. fue desplazada a la Hispania Tarraconensis, donde luchó en las Guerras Cántabras. Fue en esta campaña donde tras un enfrentamiento con los cántabros perdió su estandarte, hecho humillante para una legión, por lo que fue duramente castigada y desde entonces tuvo prohibido en adelante llevar el nombre del emperador. En algún momento durante su estancia en Hispania, sus veteranos, junto con otros de la Legio II Augusta, fueron asentados en la Colonia Iulia Gemela Acci (Guadix, Granada).
Entre el 16 a. C. y el 9 ddC está acantonada en Colonia Agrippinensis (Colonia) protegiendo las fronteras del Rin de las tribus germánicas. Con posterioridad la Legio I, ahora Germanica, permanecería acuartelada en Bonna (la actual Bonn) en la Germania Inferior hasta el 69.
El final de la Legión 69-71 El año de los cuatro emperadores,o tras el rechazo por parte de Galba de la ayuda del ejército de Germania, las legiones de la frontera del Rin aclamaron a Vitelio como emperador y marcharon sobre Roma. Sin embargo Vespasiano, nuevo pretendiente a emperador hizo hacer valer su candidatura con la fuerza y derrotó a Vitelio y a su ejército en Italia.
Durante la rebelión bátava del 70, la Legio I Germanica fue una de las legiones (la otra fue la XVI Gallica) que acudieron a ayudar a las legiones sitiadas en Castra Vetera (Xanten) a las órdenes de Didio Vócula. Sin embargo, las cosas no salieron según el plan previsto y las legiones que iban al rescate fueron finalmente sitiadas y hechas prisioneras, y muchos de sus hombres juraron lealtad al nuevo Imperio Gálico del batavio Iulius Civilis.
Cuando Quinto Petilio Cerial, enviado a la zona por Vespasiano, llegó a Germania, aceptó la vuelta a las banderas romanas de estos soldados, impidiendo a sus propios soldados que los vejasen por haber cometido un delito de alta traición, para poder utilizar sus servicios en la campaña que condujo a la derrota de Civilis. Sin embargo, terminadas las operaciones, Vespasiano decidió que el nombre de estas legiones debía desaparecer, para lo cual procedió a licenciar ignominiosamente a parte de sus soldados y al resto los humilló incorporándolos a legiones nuevas. En el caso de la Legio I Germanica, sus hombres fueron integrados con los efectivos restantes de la legión VII de Galba, creándose la nueva Legio VII Gemina.
Extraído de: http://es.wikipedia.org/wiki/Legio_I_Augusta