En 1985 en el castillo de Matsuyama se llevaron a cabo unas excavaciones arqueológicas para reconstruir el estanque desaparecido tras la Segunda Guerra Mundial. “Extrajimos decenas de toneladas de tierra. Estaba llena de basura: trozos de cristal, jeringas y frascos de medicinas. A principios del siglo XX aquí se alojaba un hospital. Uno de los pocos hallazgos de interés histórico y arqueológico fue una moneda de oro rusa de 1899”, explica Umeki.
Pero no supuso ninguna sorpresa para los arqueólogos: durante la guerra ruso-japonesa la ciudad de Matsuyama recibió miles de prisioneros rusos. Los heridos ingresaron en el hospital del castillo y los demás vivían en un campamento construido en las proximidades.
http://sp.ria.ru/opinion_analysis/20120919/155038920.html
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