1609 Henricus IIII Espada y balanza

HENRY IV EL GRANDE

(02/08 / 1589-14 / 05/1610)

Rey después de la trágica muerte de Enrique III, Enrique de Borbón, rey de Navarra, descendió del último hijo de San Luis, Robert de Clermont. Con él comienza la dinastía Borbónica que reinó sobre Francia hasta la Revolución, murió en línea directa en Francia con el Conde de Chambord y aún permanece, en Francia, en su rama más joven de Orleans y, fuera de Francia. en su rama más vieja, con las casas de España, Parma y Sicilia. Por la declaración del 4 de agosto de 1589, Enrique IV prometió el mantenimiento de la religión católica y la reunión de un concilio nacional. Aún no había llegado la hora de la guerra civil. El duque de Mayenne proclamado rey el cardenal de Borbón, a continuación, un prisionero de Enrique IV, con el nombre de Carlos X. El rey marchó sobre Normandía y Mayenne luchó cerca del castillo de Arques (21 de septiembre, 1589) pero no pudo tomar París. Un parlamento leal, presidido por Achille de Harlay, se instaló en Tours. Después de haber reconquistado toda Normandía excepto Rouen, Henri puso sitio a Dreux (febrero de 1590). Con los refuerzos del duque de Parma, Mayenne se enfrentó a él y lo encontró en Ivry (marzo de 1590). Una vez más, los jugadores de la liga fueron derrotados. El bloqueo de París, defendido por el duque de Mercœur, comenzó en mayo de 1590. Mayenne y el duque de Parma aparecieron al final del verano. Henri rodeó la ciudad con una red de ciudades fieles y esperó su momento. Por el edicto de Mantes (julio de 1591), restableció el régimen del edicto de Poitiers. A la muerte de Carlos X (1590), los españoles presentaron los derechos de la Infanta Claire-Isabelle-Eugenie, hija de Felipe II y Elisabeth de Valois. Una guarnición española se instaló en París. El duque de Saboya entró en Provenza, los españoles en Languedoc. En diciembre de 1592, Mayenne convocó a los Estados Generales a París. Abrieron en enero de 1593 y presentaron varios reclamos: un rey católico, periodicidad de Estados, restauración de libertades provinciales, recepción del Concilio de Trento en Francia, pero rechazaron la candidatura de la Infanta. Una tregua general se firmó en julio de 1593; el mismo mes, en Saint-Denis, Enrique IV abjuró del protestantismo. La Liga no tardó en desintegrarse y el rey fue coronado en Chartres en febrero de 1594. Ingresó en París en marzo siguiente. No hubo forma de represión. Picardía y el duque de Guisa se sometieron a su vez, y Clemente VIII dio su absolución a Enrique en septiembre de 1596. La guerra contra el España comenzó oficialmente en enero de 1595. Derrotado en Fontaine-Francaise (junio de 1595), los españoles tuvieron que evacuar Borgoña y fueron perseguidos hasta Franche-Comté. Mayenne se presentó en octubre, seguido por Joyeuse y Epernon. En Gran Bretaña, Mercœur siguió una guerra de guerrillas hasta 1598. Las operaciones contra los españoles no eran favorables a los franceses en 1596 y 1597. El tratado de paz fue firmado por las dos monarquías de mayo de 1598 agotado en el Tratado de Vervins devuelto a las cláusulas del Tratado de Cateau-Cambresis. Mediante el edicto de Nantes (abril de 1598), declarado perpetuo e irrevocable, la libertad de conciencia se concedió a todos los protestantes; la libertad de culto se mantuvo donde existía y se estableció en la Corte. "Salas del edicto", medias fiestas, fueron instituidos para resolver disputas entre católicos y protestantes. El partido recibió cientos de puestos de seguridad, incluidos Montpellier, Montauban y La Rochelle. La paz volvió, la situación del reino fue no menos desastrosa. Henry IV muestra el mayor del arte de gobernar, olvidando el pasado, se rodeó de ardiente católica, como Villeroy y el presidente Jeannin, junto con hugonotes fervientes como Sully, Superintendente de Finanzas en 1601. Con habilidad, gradualmente redujo el poder de los gobernadores y parlamentos. En 1600, se casó con Marie de Medici, quien le dio un delfín en 1601. En 1602, tuvo al mariscal Biron, gobernador de Borgoña, que conspiró para criar católicos. En 1606 marchó contra Sedan, la capital del duque de Bouillon, que se había escapado del reino y obtuvo su sumisión. La hostilidad persistió entre Francia y los Habsburgo. En 1601, por el Tratado de Lyon, el duque de Saboya cedió al rey de Francia Bresse, Bugey, el país de Gex y Valromey. En Italia, sin embargo, la influencia francesa permaneció nula. Francia apoyó a las Provincias Unidas detrás de escena. Del lado del Imperio, Henry intervendría en la sucesión de Cleves y Juliers cuando fue asesinado por Ravaillac, el 14 de mayo de 1610.