Fue el domingo 12 de marzo, en la iglesia de San Jerónimo el Real de Madrid, junto al museo de El Prado. En un esplendido día de primavera anticipada, se celebró la solemne inauguración del monumento sepulcral de Hans Khevenhüller (1538 – 1606), embajador permanente del Sacro Imperio, desde 1572 a 1606. En el grandioso templo, se congregó un nutrido grupo de amigos y familiares del conde Carlos Khevenhüller, descendiente directo del embajador imperial ante la corte de Felipe II.
https://www.eladelantado.com/opinion/tribuna/el-embajador-imperial-y-la-casa-de-la-moneda/
UN SALUDO