En la Republica Romana, anteriormente a la acuñación de plata (didracma campaniense), fueron utilizadas como mercancia, "MERCIS LOCO" y no como meneda legal. Precisamente el Victoriato surgió como necesidad de comerciar con las ciudades de la MAGNA GRECIA (Sur de Italia), pesando igual que la dracma ilírica de Apolonia o Dirrachion, de 3 escrupulos (3,41 gr.). Posteriormente cuando apareció el denario, pesaba 3/4 del denario.