“En el mercado siempre hubo falsificadores, pero es una cuestión de proporciones”, dijo Robert D. Mowry, un ex curador de arte asiático de la Universidad de Harvard que en la actualidad se desempeña como consultor de Christie’s. La preocupación respecto de estafas y una economía en desaceleración parecen haber moderado el entusiasmo en el mercado de arte chino. Luego de alcanzar su punto más alto en 2011, los ingresos declinaron 24% el año pasado, según Arts Economics, una compañía de análisis que estudia el mercado internacional. El sector de subastas chino y el gobierno del país dicen que quieren eliminar los abusos, pero enfrentan la debilidad de las leyes, que absuelven a las casas de subastas de toda responsabilidad si una obra es falsa.
El arte puede usarse en planes de soborno más elaborados. En algunos casos, un funcionario recibe una obra de arte con instrucciones de subastarla: un empresario la usará como moneda de soborno, por lo que comprará la pieza a un precio exagerado y le proporcionará al funcionario una ganancia insospechable. “A diferencia del efectivo, el valor es menos evidente”, dijo Zhang Pingjie, un curador del Museo del Arte del Himalaya en Shanghai. No tiene importancia si la obra en cuestión es real o no, ya que el comprador tiene pensado hacer un fuerte gasto de todas formas. De descubrirse la maniobra, el valor mínimo de una falsificación implicaría un castigo menor. El soborno de funcionarios públicos con arte está tan extendido, que los chinos han acuñado un término para describir ese tipo de corrupción estética. Lo llaman “yahui”, “soborno elegante”.
La NUMISMATICA no sera ajena a esto, asi que mucho cuidado con lo que comprais por ahí.
http://www.revistaenie.clarin.com/arte/El_arte_de_falsificar_arte_0_1024098042.html
UN SALUDO