Ya decia yo que estos cuños me eran familiares.
Hace unos siete u ocho años, me acompañaron a una chatarreria de Madrid, situada en una intrincada zona de edificios medio destartalados,donde tenian varios antiguos teléfonos militares que cogimos. A la hora de marchar, nos fijamos en un rincón donde habia cientos de cuños, miles diria yo, tirados, y preguntamos si habia alguno de militar. Nos dijeron que cierta tienda de militaria de madrid se habia quedado todos los que habia, que eran muchos, y solo quedaban de religiosos, y de medallas escolares y por el estilo, pero a cientos. Nos los vendian como chatarra, pero la verdad, pesaban demasiado para el vehículo donde íbamos y allí se quedaron. Al parecer, no debieron acabar en la fundición.