Pasaron más de dos mil años y en marzo de 1958 dos hermanos que araban sus tierras con un mulo en el Pago de la Corriente descubrieron una gran vasija de cerámica íbera. Dentro había otra vasija de menor tamaño de plata ennegrecida de 21 centímetros de diámetro y 16 kilogramos de peso. Al vaciar su contenido quedaron perplejos: muchas monedas, joyas de incalculable valor y otras piezas que no pudieron identificar. Los hermanos dieron cuenta del descubrimiento a la Guardia Civil, que se hizo cargo del tesoro. La moneda más reciente pertenecía al magistrado monetal Caius Coilius Caldus, por lo que el tesoro debió ser ocultado entre finales del siglo II a.C y principios del siglo I a.C.
http://www.ideal.es/granada/planes/201504/10/cogollos-guadix-tesorillo-20150410121659.html
UN SALUDO